9 gobernadores del país, entre los que se encuentra el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, enviaron hoy una carta al secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, Alex Azar, y al director de operaciones, General Gustave F. Perna, solicitando que aceleren la distribución de vacunas en todo el país. La carta dice que de acuerdo con informaciones dadas a conocer en medios de comunicación, el gobierno federal tiene en este momento la mitad de las vacunas, aguardando por una orden de distribución, mientras los casos de covid siguen en aumento y las cifras de muertes, en constante crecimiento.
“Según la información pública, el gobierno federal tiene actualmente más del 50% de las vacunas producidas retenidas por la administración por razones desconocidas. Mientras algunas de estas vacunas que salvan vidas, están en los congeladores de Pfizer, nuestra nación está perdiendo a 2,661 estadounidenses cada día, según el último promedio de siete días. No distribuir estas dosis a los estados que las solicitan es inconcebible e inaceptable. Exigimos que el gobierno federal comience a distribuir estas dosis reservadas a los estados de inmediato”, dicen los mandatarios en la comunicación.
De acuerdo con la carta de los mandatarios, las dosis se han retenido como medida preventiva para ‘mitigar situaciones’ que puedan surgir en el proceso de fabricación y distribución de las vacunas. Sin embargo, dicen los mandatarios, ya se habían tomado medidas anteriormente para responder a estas contingencias.
“En diciembre, Operation Wrap Speed, la alianza publico-privada creada para la distribución de la vacuna, anunció acuerdos con Pfizer y Moderna para adquirir 100 millones de dosis de vacunas adicionales de cada empresa, lo que eleva las asignaciones combinadas que se esperan para el gobierno de los Estados Unidos a 400 millones de dosis para el segundo trimestre del año. Estos acuerdos, aunados a las autorizaciones de uso de emergencia, para las vacunas de Johnson & Johnson y AstraZeneca, a finales de este año, deberían brindarle la máxima confianza, en que la línea de fabricación es sólida, segura y capaz de proteger a la mayoría del público estadounidense en los próximos años”, dice la carta.
Los gobernadores aseguran que sus estados están listos para trabajar las 24 horas del día, con el fin de aumentar la distribución y salvar más vidas estadounidenses. También dicen estar totalmente de acuerdo con el General Perna, quien en declaraciones anteriores ha manifestado que “una vacuna en un estante no es eficaz”.
“No podríamos estar más de acuerdo usted. Es por eso que le pedimos su ayuda ahora. Si trabajamos juntos, podemos poner fin a esta pandemia y volver cuanto antes a una vida normal”, dicen los mandatarios. “Nuestros mejores investigadores médicos lo han dejado muy claro: si fallamos, habrá consecuencias aún más graves para nuestras familias, nuestras pequeñas empresas y nuestra economía.
La carta fue firmada por los gobernadores de California, Illinois, Kansas, Michigan, Minnesota, Oregón, Washington, Nueva York y Wisconsin.