Un puñado de representantes de organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes y miembros de la familia de Marcelo Lucero, se dieron cita ayer en las afueras del edificio administrativo de la Villa de Patchogue, para honrar la memoria del inmigrante ecuatoriano asesinado hace 13 años, en uno de los crímenes de odio más sonados e impactantes de los últimos tiempos. Los manifestantes rindieron tributo a la memoria de Lucero y clamaron porque no haya espacio en la región para este tipo de crímenes.
“Hace 13 años, noviembre, en la misma semana en la que los Estados Unidos eligieron el primer presidente afroamericano, yo pensaba que la discriminación basada en la raza, iba a ser cosa del pasado. Pero no, no lo fue, no fue el caso. Mi familia sufrió el impacto directo del odio basado y motivado en la raza, que resultó en el asesinato de mi hermano Marcelo a manos del joven de 19 años Jeffrey Conroy”, dijo Joselo Lucero, hermano de Marcelo. “10 años más tarde se eligió un presidente que ignoró la discriminación y al contrario promovió violencia, división, ira contra todas las minorías, causando muerte y destrucción en nuestra sociedad”.
En un día como hoy, un 8 de noviembre de 2008, Marcelo Lucero, que en ese entonces tenía 37 años, fue atacado a golpes y apuñalado hasta perder la vida, por siete adolescentes blancos, quienes según consta en los reportes del caso ampliamente expuestos en corte, realizaban con frecuencia este tipo de ataques, como parte de una actividad semanal, en la que salían en busca de inmigrantes a los que llamaban despectivamente “frijoleros”.
“Recuerdo claramente que después de que el juicio contra el señor Conroy terminó, en el cual se declaró culpable del asesinato de mi hermano, yo le dije estas palabras: ”La cacería de personas de color ha terminado“, pero hoy vemos que no ha pasado así. Han pasado 13 años y estamos enfrentando lo mismo, hace dos meses un joven también de 19 años, Christopher Cella, atacó a tres individuos hispanos, por la misma razón, por su color de piel”, dijo Lucero.
Los manifestantes reunidos, al rededor de la placa conmemorativa del aniversario de la muerte de Lucero, que se encuentra ubicada en Patchogue, unieron sus voces para entonar canciones y expresar al unísono su peticiones de igualdad y respeto.
“Nunca más permitamos que los políticos de derecha o los demagogos nos dividan”, dijo Shoshona Hershkowithz, representante de Long Island Social Justice Action Network. “El verdadero enemigo es el extremismo de derecha y la supremacía blanca y todas las versiones de todas las formas de este odio, son solo un cáncer, una cepa de ese virus”.
“Estamos aquí levantando nuestras voces contra el odio y la discriminación”, dijo Ariel Mérida, representante de los jornaleros de Freeport. “Es injusto que no podamos estar seguros cuando salimos a trabajar, pensando que estamos arriesgando nuestras vidas”.
Los manifestantes terminaron los actos conmemorativos con una pequeña caminata por las calles de Patchogue, entonando cánticos alusivos al amor, la inclusión y el respeto.
Por el asesinato de Lucero, los siete jóvenes atacantes, fueron sentenciados a diferentes períodos de cárcel. Jeffrey Conroy fue sentenciado a 25 años de prisión, tras ser declarado culpable de homicidio no intencional, agravado por el odio racial.