En su afán por tratar de entender un poco mejor al nuevo Coronavirus y sus alcances, las autoridades de salud de Nueva York, le pidieron a los hospitales de la región indagar más, en las personas que están ingresando a los centros asistenciales cada día. Un nuevo estudio se enfocó en 113 hospitales y abarcó 1,269 pacientes, durante un período de tres días, arrojando datos reveladores:
Más del 50% de los pacientes ingresados proviene de la ciudad de Nueva York, lo que incluye al Bronx, Brooklyn, Queens y el corazón de la ciudad, mientras que el 18% de los pacientes proviene de Long Island, lo que incluye a los condados de Nassau y Suffolk. Los hispanos y los afroamericanos siguen siendo los grupos poblacionales con más casos positivos, 20% y 25% respectivamente, en esta muestra especifica.
Pero quizás el dato que más llama la atención de lo arrojado por este estudio, es que el 66% de las personas que ingresan al hospital por complicaciones asociadas al COVID-19, estaban en casa, bien porque son retirados (37%) o porque están desempleados (46%), lo que empieza a cambiar la perspectiva de análisis del virus.
“Pensábamos que estaban siendo contagiados en el sistema de transporte público y ahora vemos que no, que la mayoría estaba en casa”, dijo el gobernador Andrew Cuomo. “Estábamos pensando en encontrar un porcentaje más alto de empleados esenciales porque están saliendo a trabajar, es decir enfermeras, doctores, empleados del sistema de transporte, pero ese no es el caso”, añadió.
Según el gobernador los hallazgos de este nuevo estudio, nos devuelven a la lección uno, de principios de la pandemia, cuando se nos recalcaba a diario, la importancia de lavarnos las manos, desinfectar las superficies de contacto y mantener la distancia social.
“En últimas esto depende de usted. Está llevando una mascara? Está usando desinfectante de manos? Esto se trata realmente de comportamientos personales”. dijo Cuomo.
En resumen, el nuevo análisis demuestra que el COVID-19 ha atacado principalmente a los desempleados, a las minorías y a las personas mayores. Y aunque el estudio se basa en una muestra pequeña, durante un corto período de análisis, aporta nuevas pautas para manejar y combatir el virus.
En la última jornada otras 232 personas perdieron la vida por causa del COVID-19, elevando a 19,877 el total de víctimas fatales. 601 personas tuvieron que ser ingresadas en las últimas horas a los centros asistenciales de la región, por complicaciones asociadas al virus, un número que sigue en descenso de acuerdo con lo reportado diariamente por el Gobernador Cuomo, quien informó además que las cifras de intubaciones e ingresos a unidades de cuidados intensivos, también siguen descendiendo.