Con el regreso a clases esta semana, la gobernadora Kathy Hochul recordó a los padres de familia que consulten en el portal ny.gov/phonefree la política de aprendizaje libre de distracciones que corresponde a su distrito escolar o escuela chárter. A partir de este ciclo 2025-2026, la ley estatal exige que las escuelas públicas, chárter y BOCES en todo Nueva York, implementen restricciones de uso de teléfonos inteligentes y dispositivos personales con internet durante toda la jornada escolar, de “campana a campana”.
“Nuestros niños tienen éxito cuando aprenden y crecen, no cuando hacen click o se la pasan desplazándose en la pantalla”, dijo Hochul. “Animo a los padres a revisar la política de su distrito escolar para ayudar a sus hijos a prepararse para esta transición importante, que traerá resultados increíbles para estudiantes, maestros y familias”.
La nueva normativa establece un estándar estatal para garantizar entornos libres de distracciones. Entre sus disposiciones se encuentra la prohibición del uso no autorizado de celulares durante el día escolar completo, incluyendo clases, almuerzos y periodos de estudio. Cada escuela podrá diseñar su propio plan de almacenamiento de los dispositivos, y el estado ha destinado 13.5 millones de dólares para apoyar a aquellas instituciones que necesiten soluciones tecnológicas o logísticas para implementar la medida.
La política también requiere que los distritos consulten a maestros, padres y estudiantes antes de adoptarla, que se establezcan canales para que los padres puedan comunicarse con sus hijos en caso necesario y que se evite cualquier aplicación inequitativa en las sanciones.
Los alumnos podrán seguir utilizando celulares básicos sin internet y equipos provistos por la escuela, como computadoras o tabletas usadas en los planes de clase. Además, la norma contempla excepciones en casos médicos, bajo programas educativos individualizados (IEP), para fines académicos o situaciones legítimas como traducción, emergencias o cuidado familiar.
La gobernadora impulsó esta iniciativa después de realizar una gira de consultas con docentes, familias y estudiantes en todo el estado. El informe resultante, titulado “Más aprendizaje, menos pantallas: creando escuelas libres de distracciones”, concluye que los celulares limitan la creatividad, afectan la salud mental y reducen la concentración de los estudiantes. También subraya que un entorno sin teléfonos no compromete la seguridad y que la clave está en aplicar la restricción a lo largo de toda la jornada escolar, además de fortalecer la vida estudiantil con deportes, artes y clubes.
Con este paso, Nueva York se convierte en uno de los primeros estados en aplicar un estándar estatal de este tipo, en un esfuerzo por devolver la atención plena al aprendizaje en las aulas.