Como es habitual en los días feriados, el estado anunció operativos especiales durante la celebración del “Día de Acción de Gracias”, uno de los puentes festivos más largos y celebrados del año y en el que las carreteras de todo el país se ponen más concurridas que de costumbre.
El gobernador Andrew Cuomo dijo hoy que la Policía del Estado de Nueva York y las agencias locales pondrán en marcha una iniciativa especial de control del tráfico para tomar medidas enérgicas contra quienes conduzcan de manera errática e insegura durante los días festivos. El período especial de control de tráfico comienza el miércoles 25 de noviembre y se extiende hasta el domingo 29 de noviembre.
“Si bien esperamos volúmenes de tráfico más bajos este año debido a que los neoyorquinos toman las precauciones del COVID-19 y limitan las grandes reuniones, aún debemos asegurarnos de que quienes viajen lleguen a su destino de manera segura”, dijo el gobernador Cuomo. “Los policías estatales y las fuerzas del orden locales estarán trabajando para prevenir choques innecesarios causados por aquellos que se ponen detrás del volante mientras están ebrios. Insto a los conductores a seguir la ley y hacer de la seguridad su máxima prioridad mientras están en las carreteras”
La policía estatal implementará, a parte de los patrullajes regulares, puntos de control de sobriedad fijos, control del consumo de alcohol para menores de edad y la “Operation Hang Up”, que pondrá en la mira a los conductores distraídos mediante el uso de vehículos de identidad oculta, conocidos como CITE, que se camuflan en el tráfico tradicional, para ubicar mejor a los conductores que hablan o envían mensajes de texto a través del celular y otros dispositivos. Estos vehículos sin marcas se mezclan en las calles con los demás carros, pero son inconfundibles como vehículos de seguridad, una vez que activan sus luces de emergencia.
Históricamente los volúmenes de tráfico suelen aumentar durante el fin de semana festivo de Acción de Gracias. También es un momento en el que se incrementa el consumo de alcohol. Durante el período de vacaciones de Acción de Gracias de 2019, los policías arrestaron a 212 conductores por DWI, emitieron 5,168 multas por exceso de velocidad y 634 multas por conducir distraído.
“Durante el fin de semana de Acción de Gracias, los policías estarán muy visibles y estarán atentos a los conductores ebrios e imprudentes. Haga de la seguridad su máxima prioridad: siga los límites de velocidad publicados, asegúrese de que todos estén abrochados, deje su teléfonos, y no se ponga detrás del volante si está incapacitado”, dijo el superintendente Keith M. Corlett.
El estado le recordó a los conductores que si manejan ebrios o drogados, no solo ponen en riesgo su vida y la de los demás, sino que también podría enfrentar arresto, encarcelamiento y multas sustanciales y honorarios de abogados. El arresto promedio por conducir y beber cuesta hasta $ 10,000.
