A pesar de que Hempstead es una de las poblaciones de Long Island con mayor influencia Latina, debido a que más del 50% de sus habitantes proviene de alguno de nuestros países, en el gobierno de esta villa del condado de Nassau, no hay un solo funcionario que represente a nuestra comunidad. La participación de los latinos en el gobierno de la aldea es nula, lo que ha hecho evidente la distancia entre la administración y sus residentes, un abismo que ha prevalecido por años.
Con el ánimo de cambiar ese panorama y lograr que nuestra gente se vea genuinamente representada, para que tenga “voz y voto”, Herbert Flores, un dinámico residente de Hempstead, que lleva años involucrado con la comunidad, decidió emprender una carrera histórica en este pedazo de la isla y competir por la alcaldía de la Villa.
“He visto que durante demasiado tiempo, la comunidad ha sufrido sin acceso a oportunidades y recursos para prosperar con éxito con sus familias en Hempstead”, dice Flores.
Herb, como cariñosamente le llaman sus amigos, cree que se puede hacer mucho más de lo que se ha logrado hasta ahora, para mejorar la calidad de vida de sus vecinos. Lo ha descubierto de primera mano, durante su trabajo en varias asociaciones cívicas y empresariales, en las que ha analizado la posibilidad de darle un revolcón a los vecindarios, llenar los negocios vacíos, incrementar la seguridad pública y crear trabajos mejor remunerados para todos.
Esos son en esencia los “caballos de batalla” de su campaña, pero más allá de las propuestas y las promesas políticas, su principal valor, dice, es ser uno de nosotros: un hijo de El Salvador, que emigró a los Estados Unidos con un cúmulo de sueños y que ha construido, como muchos de los inmigrantes que llegan a territorio americano, una familia, una historia y un legado, lejos de la tierra que lo vio nacer.
“Vine aquí con el sueño americano que comparten muchos de mis vecinos de Hempstead. Tener un hogar para mi familia y convertirme en un padre orgulloso, con mi hijo mayor, Herb Jr., trabajando para el gobierno, mi segundo hijo, Cristian, liderando una compañía de producción, Helen, una estudiante de LIU Post y mi hija menor, Maricelys, una orgullosa Marina de los Estados Unidos”, dice Herb. “Mi historia no es muy diferente a la de la mayoría de las personas que viven en este pueblo, donde los padres solo quieren que sus hijos tengan mejores oportunidades que ellos y el derecho a buscar una educación superior. Como inmigrante naturalizado, es muy importante para mí que a los ciudadanos estadounidenses no se les niegue el derecho a postularse para un cargo”.
Flores es graduado de la escuela secundaria de Roosevelt y tiene estudios en Administración de Empresas, además, es agente inmobiliario licenciado, agente de seguros y notario público del estado de New York. No llegó a a la actividad política de la noche a la mañana, éste es un sueño que ha venido forjando por varios años, desde que se desempeñó como subdirector de la oficina de asuntos para las minorías del condado Nassau, convirtiendo su oficina en un espacio de puertas abiertas para todos.
“Herb amplió oportunidades para empresas de minorías y de mujeres, logrando la mayor participación de minorías en la historia del condado. Él aumento los esfuerzos de alcance para ayudar a pequeñas empresas a crecer y a aumentar oportunidades de empleo. Como profesional de gobierno, Herb ha trabajado en cooperación con agencias sin fines de lucro locales, municipalidades, ciudades y con el estado de New York para traer programas claves e importantes para las minorías”, dice la hoja de vida de Herbert, publicada por su campaña.
Flores considera que contar con un alcalde latino sería una oportunidad única, que le daría aires renovados a esta villa.
“Tenemos que reconocer que existe una barrera del idioma real en este pueblo. Actualmente no hay una sola persona que tenga OFICINA PÚBLICA en el pueblo que hable el idioma de la creciente población hispana. En Hempstead, los hispanohablantes que residen en el pueblo no tienen una persona en el gobierno que use su voz para representarlos, asegura Flores. ”Como primer alcalde latino, usaré mi voz para representar a todas las personas que viven en Hempstead, incluidos los residentes de habla hispana. Me aseguraré de que TODOS, incluidos los que no hablan inglés, estén incluidos y sean bienvenidos a participar en el proceso gubernamental“.
Herbert dice que quiere crear un gobierno de inclusión en el que todos tengan un espacio y una oportunidad. Quiere además unir a la comunidad afroamericana con las comunidades latinas, para que se acaben las barreras, los conflictos y las diferencias. Quizás por eso, desde que anunció sus aspiraciones de llegar a la alcaldía, no ha parado de recibir apoyo y adhesiones de muchos sectores de la comunidad, que ven en sus ideas, una esperanza de cambio y desarrollo.
“La gran cantidad de apoyo ha sido abrumadora. Estoy muy agradecido por esta maravillosa comunidad y por cada persona que ha expresado su apoyo, con humildad les agradezco por la fe que han puesto en mí. Anteriormente, he trabajado con muchas de las personas que me apoyan y hemos logrado mucho juntos. Espero volver a trabajar con ellos en calidad de alcalde“, dice Flores.
Herbert intenta cautivar el voto de la comunidad, con la promesa de trabajar en temas cruciales para la villa, como la calidad de las escuelas públicas. “ Es por eso que estableceré un comité en nombre de la oficina del alcalde de la aldea, para comenzar un diálogo entre las escuelas públicas de Hempstead y la oficina del alcalde. Debemos construir un puente con la Junta de Educación de Hempstead para lograr oportunidades educativas de mejor calidad para nuestros jóvenes”, dice.
La seguridad es otra de las preocupaciones del candidato, y en ese campo propone restablecer el Grupo de Trabajo sobre Pandillas, para abordar con soluciones, un tema que le ha hecho mucho año a esta localidad. Flores también propone la instalación de más sitios para pruebas covid, reducción de impuestos, trabajar en el desarrollo económico del pueblo, liderar programas de apoyo a las personas mayores, estrategias de respaldo a los jóvenes y por supuesto, trabajar hombro a hombro con los latinos.
“El lema de la campaña, “Juntos podemos”, se centra en la inclusión. He dicho que no hay fiestas, pero que todos son bienvenidos. Nuestro pueblo no necesita ideologías partidistas. Quizás uno de nuestros problemas como aldea ha sido que a menudo nos centramos demasiado en la política de partidos y nos polarizamos. Necesitamos líderes que se preocupen por las personas que viven aquí y sus necesidades. Nada más y nada menos”, dice Flores.
Con sus ideas y el apoyo incondicional de su familia y amigos, Herb aspira llegar a la meta el próximo 16 de marzo y marcar un hito al convertirse en el primer alcalde Latino en la historia de Hempstead. El asegura que esa sería no solo la culminación de un sueño personal, sino también la oportunidad de aplicar todos los valores de lucha y entrega que le enseñaron sus padres desde pequeño, en El Salvador. Sería además el momento perfecto para que la comunidad latina que ama y defiende, tenga por fin, la participación que ha pedido a gritos, durante muchos años, en este pedazo de Long Island.