Luego de cuatro años de lucha y de vivir literalmente en una montaña rusa de emociones, ayer las esperanzas de los beneficiarios del TPS en todo el país, volvieron a estar en su punto más alto, luego de que el presidente Biden anunciara que en su calidad de representante del estado, se sentará a negociar la demanda interpuesta por los hijos de los tepesianos, en la que exigen no ser separados de sus padres. La querella surgió durante la administración Trump, ante el intento del entonces presidente, de terminar con el Estatus de Protección Temporal para una docena de países beneficiarios. La decisión de ayer, abre nuevamente un camino hacia un posible acuerdo que permita la residencia permanente para más de 400 mil beneficiarios del Estatus de Protección Temporal en todo el país.
“Hoy, estamos contentos de saber que la administración finalmente acordó entrar en negociaciones en nuestra demanda, pero queremos dejar en claro que esta lucha está lejos de terminar”, dijo Crista Ramos, titular de la demanda contra el estado. “Necesitamos que la administración siga anunciando re-designaciones del TPS y expandiendo el programa a todas las comunidades migrantes que necesitan ayuda en estos momentos de crisis sin precedentes”, expresó la joven quien además es líder de planificación de la Alianza Nacional del TPS e hija de beneficiarios del estatus.
Durante la administración Trump, los beneficiarios del TPS se convirtieron en blanco de ataques por parte del mandatario, quien anunció el fin del beneficio. La demanda interpuesta por Ramos, en contra del estado, permitió prolongar el TPS y darles un respiro de a meses, mientras se definía el desenlace del litigio. Con la llegada del presidente Biden al poder, la nueva administración había solicitado en dos oportunidades, extensiones de 60 días, para estudiar a fondo la demanda. Ayer, finalmente el gobierno Biden anunció que no habrá más largas y que su gobierno se sentará a negociar.
“Hoy ambos equipos legales en representación de los demandantes y la administración, han solicitado oficialmente una moción conjunta para ingresar al Programa de Mediación del Circuito. Esto significa que la administración Biden ahora entrará oficialmente en negociaciones para llegar a un posible acuerdo con los demandantes y resolver la demanda que comenzó después de que la administración Trump intentara terminar el Estatus de Protección Temporal, TPS”, dijo a través de un comunicado la Alianza Nacional por el TPS.
“La verdad para mi como tepesiana, es una luz de esperanza y por fin vemos resultados del largo trabajo que hemos tenido por los últimos cuatro años y con la fe en Dios que va a salir algo positivo de todo este trabajo de la demanda”, dijo Cecilia Martínez, miembro de la Alianza Nacional por el TPS. “Que ponga la mano en su corazón y que nos den ya la residencia permanente, que es por lo que hemos estado luchando por los últimos cuatro años, seguimos con fe y esperanza en que lo vamos a lograr”.
Según la Alianza, este litigio le ha permitido a la comunidad Tepesiana mantenerse “con vida” en términos migratorios y luchar contra “los flagrantes ataques racistas de la administración Trump”. Ahora es momento de pasar del “dicho al hecho” e intentar conseguir resultados tangibles y duraderos, con la administración Biden.
“Continuaremos elevando la demanda para que el Congreso tome medidas inmediatas sobre la legislación que garantizaría la residencia permanente para mis padres y para los padres de más de 275.000 estadounidenses, hijos ciudadanos”, dijo Ramos.
Qué significa a corto y largo plazo que el presidente Biden haya aceptado sentarse a negociar?
De acuerdo con la Alianza Nacional por el TPS, si las negociaciones siguen en curso al 20 de agosto de 2021, el gobierno debe emitir un nuevo Aviso del Registro Federal que prorrogue la autorización del TPS por 9 meses más, para los beneficiarios de Honduras y Nepal. A todos ellos, de acuerdo con las decisiones tomadas en la administración Trump, su estatus se les vencería en esa fecha y tendrían que abandonar el país.
Si las negociaciones siguen en curso para el 4 de septiembre de 2021, el gobierno debe igualmente emitir una prórroga de nueve meses de TPS y autorización de trabajo, para los beneficiarios de El Salvador, Haití, Nicaragua y Sudan.
Por supuesto la más importante de las repercusiones que es la que todos están esperando, es que las negociaciones dejen como resultado el anuncio de residencia permanente para los países involucrados en la demanda y que por fin, el sueño de un estatus legal definitivo sea una realidad para esta comunidad, después de tantos años de lucha.
A la par de la demanda de Ramos, en el Congreso de los Estados Unidos se sigue discutiendo el llamado paquete de reconciliación, en el que se analiza un camino a la residencia permanente para los soñadores, los titulares de TPS, los trabajadores agrícolas y los trabajadores esenciales.
“No descansaremos hasta que nuestras familias puedan vivir en paz sin temor a la separación y lucharemos para asegurarnos de que seamos incluidos en cualquier propuesta legislativa que pueda garantizar protecciones permanentes ”, dijo la Alianza.
