Las cifras de COVID-19 en el condado de Suffolk, siguen camino a la cima. En la última jornada la región reportó 1,111 nuevos casos, con los que el índice de contagio se ubica en un alarmante 6.0%. Los números de los hospitales, en los que las autoridades de salud han decidido concentrarse en esta nueva etapa de lucha contra el virus, también van en ascenso: 310 personas están recluidas en los centros asistenciales de la región, por alguna complicación asociada al covid, 23 más en solo un día. El ejecutivo dijo que la trayectoria de los números es preocupante y que vamos en camino hacia terrenos que ya recorrimos en la primavera.
“Si continuamos a este ritmo, en Navidad vamos a tener más de mil personas en los hospitales por covid-19 y para poner eso en perspectiva, en el pico de la primavera, cuando nuestra región era el epicentro del virus, teníamos 1,658 pacientes en los hospitales. No se puede negar que la trayectoria de estos números es alarmante y la segunda ola está aquí”, dijo el ejecutivo.
De acuerdo con cifras entregadas en la tarde de hoy por el gobernador, en solo una semana la región de Long Island reportó 188 nuevas hospitalizaciones por covid, el mandatario dijo que en los últimos 3 días, 64 nuevos pacientes han ingresado a los centros asistenciales de la isla, debido al virus.
Los nuevos casos son consecuencia directa de las celebraciones que acaban de pasar y como lo han explicado en repetidas veces las autoridades, se han originado en reuniones pequeñas, desarrolladas en las salas de las casas, en muchos casos con la idea de que todo el mundo está sano y está a salvo. Para explicar la importancia de ponerle freno a este tipo de actividades el ejecutivo mencionó hoy un caso reciente que se registró en el condado, durante la celebración de un cumpleaños: De los 10 asistentes a la fiesta, 9 resultaron contagiados con covid-19 y esa pequeña celebración, terminó convirtiéndose en un foco de propagación.
“Estaban cumpliendo las normas, estaban en los límites, pero es exactamente el tipo de eventos donde estamos viendo la propagación y donde hemos estado prendiendo las alarmas”. dijo Bellone.
El ejecutivo dijo también que rastreadores de contacto pudieron establecer que todos los trabajadores de una pequeña compañía solar resultaron contagiados de COVID-19, como resultado de que no siempre cumplían con las normas preventivas y los protocolos de seguridad en el espacio de trabajo.
A pesar de los casos, los hechos y los números, el funcionario dijo también que hay un aspecto positivo en esta segunda ola, si se compara con la primera y es que tanto la gente, como las autoridades y los especialistas de salud, ya hemos recorrido este camino y todos sabemos qué hacer para controlar la situación.
“Lo hicimos en primavera, lo podemos hacer ahora. Es tiempo de doblar las medidas de sentido común que funcionaron antes”, señaló Bellone
La vacuna está a la vuelta de la esquina, el gobernador ha dicho que en menos de dos semanas el estado recibirá el primer cargamento de 170 mil dosis, que sin haber llegado ya tienen dueño, puesto que serán destinadas a los hogares de ancianos y los trabajadores de primera línea. Por eso el ejecutivo insistió en que mientras la inmunización llega de manera masiva a todos los sectores de la población, los protocolos de salud siguen siendo la única alternativa para enfrentar el virus.
“No importa qué haga o dónde esté, la distancia social y las máscaras son vitales”, dijo.