El escultor local Enrique Cabrera, el mismo que hace unos días nos sorprendió al convertirse en el primer artista latino en hacer una alianza con la villa de East Hampton, para exponer en el parque Herrick un imponente toro de platino, vuelve a lograr un hazaña artística, al ubicar una obra representativa de la cultura mexicana, en pleno Rockefeller Center.
El artista, originario de Poza Rica, Veracruz, está empeñado en hacer que la cultura latina sea reconocida a nivel mundial, mediante la exposición de sus obras en grandes escenarios. Esta vez, aprovechando la cercanía de la tradicional celebración mexicana del Día de Muertos, plantó a “Palmarius”, una cabeza de calavera de 2 mil libras de bronce puro, en el lobby principal del Rockefeller, a la vista de cientos de personas que transitan diariamente por el emblemático lugar.
“Es un logro muy Importante en mi carrera, ser el primer escultor en poder hacer una exposición en este punto tan importante, que es el acceso principal. Miles y miles de personas podrán apreciar esta gran obra que refleja nuestra esencia, nuestras raíces y tradiciones, en una pieza de arte”, dijo Cabrera.
El Rockefeller Center es la más reciente parada de “Palmarius”, que también ha estado expuesta en el museo del Louvre, en Paris y el museo Picasso, entre otros importantes lugares, haciendo honor a su nombre, cuyo significado en latín, es “pieza maestra”.
Cabrera, el artista radicado en los Hamptons, pasa sin duda por una muy buena racha, producto según sus propias palabras, de años de trabajo y sacrificio: Luego de instalar El Toro de Platino, en el Corazón de East Hampton, logró que otra de sus obras, el Toro de Oro, se subastara por un millón de euros, en Italia, durante la gala benéfica de amfAR, una organización sin fines de lucro dedicada a la investigación y prevención del VIH (Haga click aquí para ver imágenes de la histórica subasta). La fresa en el pastel de esta serie de triunfos artísticos, es la exposición de un símbolo cultural mexicano en uno de los complejos comerciales más importantes del mundo.
“A lo largo de mi carrera he tenido la oportunidad de vivir grandes experiencias, algunas más grandes que otras, pero al final todas inigualables, con un impacto social y cultural importante y trascendente, tal es el caso de mi exposición en curso en Rockefeller Center”, dijo Cabrera. “Y llegó a la conclusión de que es de gran importancia dar toda la difusión necesaria a nuestros proyectos para así poder buscar las oportunidades y rutas de incidencia positiva, que sumen de diferentes maneras a nuestra sociedad y así de esta manera logramos que se generan puentes de comunicación que definitivamente afectaran positivamente a todo nuestro entorno”.
“Palmarius” estará a la vista de todos hasta el 2 de noviembre, en el lobby del Rockefeller Center, que está ubicado en el 45 de Rockefeller Plaza, en la ciudad de Nueva York. Si usted se da una pasada por el complejo y decide tomarse una foto con este símbolo artístico y cultural, no olvide que es obra de manos latinas, manos orgullosamente mexicanas. [ngg src=”galleries” ids=”91″ display=”basic_thumbnail” thumbnail_crop=”0″]