El Departamento de Servicios Públicos de Nueva York completó la primera fase de la investigación que se ordenó luego de la tormenta Isaías y de lo que el estado calificó como una respuesta fallida por parte de algunas empresas prestadoras de servicios. El gobernador Andrew Cuomo, dijo esta mañana que como resultado de esa primera fase, el Departamento ha enviado cartas de aviso por aparente infracción a PSEG-LI y tres proveedores de servicios eléctricos más (Con Edison, Orange & Rockland y Central Hudson,) y al proveedor de telefonía, cable e Internet Altice-Optimum. Las empresas enfrentarán fuertes sanciones y están obligadas a tomar acciones correctivas inmediatas para que no se repitan fallas similares durante el resto de la temporada de huracanes, según el anuncio del mandatario.
El estado ha dicho que sigue latente la amenaza de suspender el contrato de PSEG-LI con LIPA y revocarle la franquicia a Con Edison y Orange & Rockland, la investigación lo considera necesario.
“La respuesta de las empresas eléctricas a la tormenta tropical Isaías fue completamente inaceptable. Quince días después y todavía estamos escuchando quejas de familias y empresas”, dijo el gobernador Cuomo. “Con muchas semanas que quedan en la temporada de huracanes, no tenemos el lujo del tiempo: las empresas de servicios públicos deben actuar de inmediato para reparar su aparato de respuesta a tormentas averiado, y el Departamento de Servicios Públicos debe actuar con mayor rapidez para responsabilizar a las empresas de servicios públicos”, dijo el gobernador.
El gobernador también dijo que propondrá una legislación para facilitar y acelerar el proceso de pérdida de una franquicia para las empresas de servicios públicos, en casos de fallas graves, como las que se han registrado en los últimos días.
“Estas empresas de servicios públicos saben cuándo vamos a tener tormentas y cuándo vamos a tener emergencias, esa es la manera como funciona este negocio y por lo que les pagamos. Necesitan hacerlo mejor y los hacemos responsables “, señalo Cuomo.
La investigación del Departamento de Servicios públicos encontró que en el caso específico de PSEG LI, la compañía falló en su sistema de gestión de interrupciones, tuvo comunicaciones inexactas y problemas con su centro de llamadas, por su parte el proveedor de telefonía e internet, Altice-Optimum, aparentemente no siguió su plan de emergencia y los protocolos de comunicación, entre otras fallas.
El DPS también ha notificado a PSEG LI que no recibirá el incentivo de compensación del 2020 por valor de 10 millones de dólares, como primer paso y que las ganancias deben ser utilizadas compensando a las familias y pequeñas empresas que perdieron alimentos y medicamentos como resultado de los cortes extensos. PSEG LI acató la medida y al principio de la semana empezó a recibir los reportes de quejas de los usuarios insatisfechos, con miras a reembolsarles el valor de sus pérdidas.
El Estado está ordenando a las empresas de servicios públicos que emprendan varias acciones correctivas y de modernización de sus sistemas, para que en futuras emergencias, no se repita esta situación.