La gobernadora Kathy Hochul anunció hoy que más de 64 millones de dólares de fondos federales serán destinados ayudar a poblaciones vulnerables, para que puedan sufragar sus gastos en medio de las limitaciones económica que todavía genera la pandemia. A través de la Oficina estatal de AsistenciaTemporal y para Discapacitados y la Oficina estatal para la Prevención de la Violencia Doméstica, el Fondo de Asistencia de Emergencia para la Pandemia, proporcionará pagos únicos para ayudar a las familias con dificultades, con el costo de los pañales, cubrir los gastos de alimentos en los hogares conformados tanto por niños como por adultos mayores, y brindar asistencia crucial de vivienda y reubicación para sobrevivientes de violencia doméstica.
“La pandemia ha puesto al descubierto las desigualdades que existen en nuestra sociedad, dejando a los neoyorquinos vulnerables que ya estaban luchando, aún más atrás”, dijo la gobernadora Hochul. “Con la ayuda de nuestros socios federales, mi administración está tomando medidas decisivas para aliviar la carga de esta crisis de salud pública sobre las familias en apuros, con niños pequeños, quienes mantienen a un familiar mayor en su hogar y sobrevivientes de violencia doméstica. Esta financiación fundamental ayudará a decenas de miles de familias a pagar alimentos y pañales, al mismo tiempo que brindará un salvavidas a los sobrevivientes de violencia doméstica que necesitan reubicación y apoyo para la vivienda”.
A partir de este mes, OTDA emitirá pagos únicos a todas las familias inscritas en Asistencia Pública o en el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) que tengan un hijo menor de tres años. Las familias recibirán 140 dólares por niño elegible, para ayudar con el costo de los pañales. Se prevé que la financiación sirva a aproximadamente 150,000 niños en 128,500 hogares en todo el estado, dijo la gobernadora.
Para cubrir los costos de los alimentos, la agencia también emitirá pagos únicos en abril, de 730 dólares a los hogares que están inscritos en Asistencia Pública o SNAP, y tienen un adulto de 55 años o más y un niño de 17 años o menos. Los hogares recibirán pagos únicos por cada adulto mayor elegible en el hogar. Se espera que aproximadamente 26,300 hogares reciban esta asistencia.
“Sin duda, los neoyorquinos aún se están recuperando de la pandemia, incluidos muchos que luchaban por salir adelante incluso antes de que comenzara la emergencia de salud pública hace casi dos años. Esta financiación brindará un importante alivio a corto plazo para familias con niños pequeños o un miembro mayor en el hogar, mientras continuamos recuperándonos colectivamente de la crisis económica provocada por la pandemia”, dijo el comisionado interino de la OTDA, Daniel W. Tietz.
En ambos casos, OTDA emitirá estos pagos directamente a la cuenta de Transferencia Electrónica de Beneficios (EBT) del hogar.
Además, el Fondo de Asistencia de Emergencia por la Pandemia proporcionará 21.4 millones para que OPDV los administre a los proveedores de servicios de violencia doméstica con el fin de que puedan ayudar a los sobrevivientes con niños que son elegibles, para Asistencia Temporal para Familias Necesitadas. Estos fondos ayudarán a los sobrevivientes a pagar los gastos a corto plazo asociados con la reubicación, incluidos el alquiler, los servicios públicos y las reparaciones.
“Las necesidades y las voces de los sobrevivientes están a la vanguardia de nuestro trabajo para transformar los sistemas de prestación de servicios de violencia doméstica y sexual para que estén más centrados en los sobrevivientes”, dijo La directora ejecutiva de OPDV, Kelli Owens. ” Los sobrevivientes conocen mejor sus necesidades, y estos fondos permitirán a los proveedores de servicios trabajar directamente con ellos, especialmente con los negros, los indígenas y sobrevivientes de color, para satisfacer esas necesidades de inmediato y con flexibilidad”.
La gobernadora dijo que el estrés, el desempleo y las presiones financieras no hacen que las personas abusen de sus parejas, pero estos factores pueden provocar un aumento en la frecuencia y la gravedad de la violencia y crear situaciones más peligrosas para las víctimas, especialmente cuando se combinan con el aumento del aislamiento social. Durante el apogeo de la pandemia de COVID, las llamadas a la línea directa de violencia doméstica y sexual del estado de Nueva York, aumentaron un promedio del 45%.