El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció en su conferencia de prensa matutina de este sábado, que firmará en las próximas horas una orden ejecutiva para autorizar a las farmacias privadas, a recolectar pruebas de COVID-19. La nueva disposición hace parte del programa que busca incrementar de 20 mil a 40 mil, las pruebas que se realizan diariamente, como lo anunció el mandatario la semana pasada después de su reunión con el presidente Trump. Para cumplir con esta meta, se hace necesario ampliar el número de puestos de recolección de muestras, por lo que el gobernador hará uso de las 5 mil farmacias independientes que hay a lo largo del estado, para que colecten las pruebas y se las envíen a los laboratorios especializados.
“Todo el mundo quiere hacerse un test, pero no todo el mundo puede hacerlo, porque tenemos un capacidad limitada, pero al incrementar los puntos de recolección de datos, podemos incrementar la elegibilidad”, señaló el mandatario.
El gobernador anunció que por ahora la prioridad para someterse a este tipo de pruebas la tendrán, bomberos, paramédicos, oficiales de policía, trabajadores del sistema de transporte y los oficiales de las correccionales, así mismo todos los que hagan parte del sistema de salud del estado, entre los que se encuentran, proveedores, médicos, enfermeras, médicos especialistas, nutricionistas, dietistas, terapistas ocupacionales, psicólogos y residentes de los diferentes programas.
“Esperamos llegar al punto en que cualquier persona que quiera un test pueda ir a la farmacia cercana y realizárselo, pero éste es el comienzo”, afirmó Cuomo
Las cifras más recientes
En las últimas horas la cifra de muertes causadas por el COVID-19 en el estado, tuvo un incremento de 15 personas, es decir que 437 pacientes perdieron la batalla contra el virus en esta jornada. El gobernador dijo que aunque la cifra sigue siendo una “terrible noticia”, hay una mejoría notoria si se compara con los datos de los días más complicados de esta crisis. En los centros asistenciales de la región sigue ingresando diariamente un promedio de 1,200 casos nuevos de COVID, elevando a 282,143 el total de infectados. El mandatario insistió en la necesidad de conservar las medidas de “Nueva York en Pausa”, hasta que el promedio de nuevos casos descienda al menos a los 200 por día.
“No es retórica, lo que hemos hecho hasta ahora, ha salvado vidas” recalcó el gobernador.