Ola of Eastern Long Island, la organización que apoya a la comunidad latina del East End, sigue empeñada en darle respaldo y soporte a los jóvenes de nuestra área que enfrentan desafíos de salud mental, una realidad bastante común en nuestra población menor, causada por problemas migratorios, económicos, conflictos familiares, racismo, acoso en las escuelas y muchas otras razones, que se han evidenciado aún más durante la pandemia. La estrategia más reciente de Ola para combatir esta situación y dejarle saber a los jóvenes que no están solos, ha sido la elaboración de una serie de videos, en los que algunos de ellos, de viva voz, cuentan sus casos y comparten la manera como han ido superando su situación.
“Los videos presentan a adultos jóvenes que comparten aspectos de los desafíos de salud mental y emocional que continúan superando. Son honestos y valientes en su esfuerzo por romper el silencio y el estigma en torno a este tema”, dice Ola en la presentación de los vídeos.
La tercera de estas piezas audiovisuales fue presentada hoy y muestra a un joven de origen mexicano, a quien una crisis emocional lo hizo poner en pausa sus estudios de primer año en Georgetown, por sentirse inferior al resto de sus compañeros de universidad y creer que no merecía un espacio en este centro de educación superior.
“Con esta mentalidad de pensar demasiado y castigarme, tomé un permiso de ausencia y me quedé en casa durante todo el 2019. Estaba en un lugar perdido y sentía que no podía terminar mi educación universitaria como esperaba. Tal vez fue un gran error soñar tan grande”. dice Jon López, el protagonista de este capítulo.
En el video Jon relata cómo el deporte y otras actividades lo fueron sacando de su crisis y le devolvieron la confianza necesaria para regresar a la universidad, donde ahora se siente más cómodo que nunca.
Con los videos, elaborados por la joven realizadora Allura Leggard, residente de Sag Harbor, se busca motivar a otros menores para que hablen de sus problemas y busquen ayuda cuando se vean agobiados por situaciones similares a las que allí se narran.
“Hablar es curativo”, dice Minerva Pérez, directora ejecutiva de Ola. “Lo mejor es hablar con un adulto de confianza, un trabajador social de la escuela, un consejero de orientación o su médico. Si no puede encontrar ayuda, llame a OLA para que lo remitan a profesionales de la salud mental”.
La mayoría de los jóvenes menores de 19 años son elegibles para un seguro que cubra el apoyo profesional de salud mental.
Algunos números locales GRATUITOS y CONFIDENCIALES en donde nuestros jóvenes pueden solicitar respaldo emocional son:
- 911 en caso de emergencia
- Línea directa de respuesta ante crisis, disponible 24 horas al día, 7 días a la semana, para residentes de Long Island: 631-751-7500
- Línea nacional de prevención del suicidio, disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana: 1-800-273-TALK; Ayuda En Español 24/7: 1-888-628-9454
- Conexión: Una línea de teléfono para gente en crisis que sirve a la comunidad hispana del condado de Suffolk de lunes a viernes, entre las 5 de la tarde y las 10 de la noche: 631-751-7423
- Línea directa para fugitivos (consejería de intervención en crisis y asistencia de vivienda de emergencia para jóvenes fugitivos que viven en la calle) 1-800-RUNAWAY
- Línea directa DASH para respuesta a crisis de salud mental y abuso de sustancias- 631-952-3333
- También puede llamar a OLA para que le ayude a localizar la asesoría indicada para cada caso, al 631 899 3441
- Si prefiere mensajes de texto, en lugar de hablar directamente con alguien, puede hacerlo mandando la palabra HOME al 741-741 para iniciar la charla, con un consejero de crisis.
