Más de un centenar de personas cumplieron las citas del 18 de noviembre, en las que la organización de apoyo y respaldo a las inmigrantes latinas de Long Island, SEPA Mujer, tiró la casa por la ventana, para abrir de manera oficial, las puertas de lo que será de ahora en adelante, su espacio propio, para seguir sirviendo a la comunidad.
“Mirando hacia atrás, quién hubiera imaginado que las percepciones de una joven estudiante de derecho, sobre las brechas en el sistema, hace 28 años, continuarían existiendo como algo impactante, significativo e increíble, como lo es SEPA Mujer”, dijo una emocionada Martha Maffei, directora ejecutiva de SEPA Mujer, en su discurso de inauguración de la nueva sede. “SEPA Mujer se erige como una organización dirigida por mujeres inmigrantes que trabajan incansablemente para garantizar su sostenibilidad y crecimiento, día a día, año tras año y generación tras generación.
Para esta organización que ha acumulado casi tres décadas ayudando a nuestra gente, alcanzar el logro de tener una “casa propia” para seguir expandiendo sus servicios y acompañando a la comunidad en sus múltiples necesidades, es más que un sueño hecho realidad.
“Cuando empecé en SEPA Mujer en el 2008, como coordinadora de programa a tiempo parcial y la única empleada en la organización, fue una batalla cuesta arriba”, recuerda Maffei. “Fue realmente muy desafiante, pero ahora que miramos hacia atrás en esos momentos, puedo ver cómo cada esfuerzo, cada sacrificio, valió la pena”.
Martha segura que después de tantos años de entrega y trabajo, la agencia se siente inmensamente orgullosa de decir que cuenta con la mayor cantidad de personal que haya tenido en toda su historia y una variedad de programas y herramientas, disponibles para la comunidad. Todo en un mismo espacio que ahora llaman “hogar”.
“No estaríamos aquí al frente de ustedes sino fuera por dos cosas: la primera, que los inmigrantes soñamos y soñamos grande. Somos unos soñadores. Y la segunda, que nuestros sueños los hacemos realidad” dijo.
En la nueva casa, ubicada en el 110 N de Ocean Avenue, en la villa de Patchogue, SEPA seguirá brindando apoyo a las víctimas de violencia doméstica, asesoría legal, respaldo a las madres solteras y orientación en un sin número de programas cívicos y de justicia social.
“Este nuevo edificio que llamamos nuestro hogar, es un lugar seguro para inmigrantes en busca de servicios, es un lugar para hombres y mujeres, chicos y grandes, para nuestros hermanos y hermanas que necesitan una voz”, dijo Maffei. “Estoy orgullosa de usar esas palabras de nuestra activista mexicana Dolores Huertas “Si se puede” y ahora yo digo “Si se pudo””.
La inauguración oficial de esta sede, contó con la presencia de varias personalidades del condado de Suffolk, representantes de otras organizaciones y líderes comunitarios. Durante el evento la legislatura del condado le otorgó a SEPA dos proclamaciones por la labor cumplida en estos 28 años de historia. La alegría de la apertura fue cerrada, con broche de oro, en horas de la noche, con un coctel de celebración, que además sirvió como jornada de recaudación de fondos, para continuar en su incansable misión de servir.
