El Departamento de Seguridad Nacional tomó medidas para poner fin al Estatus de Protección Temporal, conocido como TPS, para ciudadanos hondureños y nicaragüenses radicados en los Estados Unidos. La administración Trump, anunció este lunes la cancelación de este beneficio que protegía a miles de inmigrantes de la deportación desde 1999. La medida afecta a unos 72 mil hondureños y 4 mil nicaragüenses, quienes tendrán que buscar a partir de ahora, otras alternativas para permanecer en el país de manera legal o aventurarse a enfrentar la posibilidad de ser deportados.
El gobierno Trump ha expresado que las razones que llevaron a los Estados Unidos a emitir esta medida de protección temporal para los nacionales de Honduras y Nicaragua, ya no existen. Se refiere al paso implacable del Huracán Mitch en 1998, un fenómeno que dejó una estela de muerte y destrucción y obligó a cientos de centroamericanos a salir de sus países en busca de estabilidad. Los gobiernos de Honduras y Nicaragua argumentaron en aquel entonces que la devastación causada por la tragedia impedía el retorno de sus ciudadanos en condiciones seguras y favorables.
El TPS para ambos países fue establecido el 5 de enero de 1999, sobre la base de desastre ambiental. La última extensión de la figura fue emitida el 13 de junio de 2023, bajo la administración Biden y venció el 5 de julio de 2025, sin que haya posibilidad de renovación porque el Departamento de Seguridad Nacional considera que en la actualidad las condiciones de Honduras y Nicaragua ya no justifican esas protecciones.
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, reaccionó esta tarde, frente a la nueva disposición del gobierno Trump, catalogándola como otro ataque cruel contra los inmigrantes.
“Decenas de miles de hondureños y nicaragüenses que huyeron de sus países de origen para evitar el peligro, han dependido del estatus de protección para vivir en nuestra nación, contribuir a nuestra cultura y sociedad”, dijo la fiscal James. “Seguiré luchando contra este otro ataque cruel en contra nuestras comunidades”.
El gobierno aún no ha emitido un documento oficial en el registro federal con la terminación de la protección, pero se espera que se produzca en las próximas horas. A partir de ese momento, los hondureños y nicaragüenses cobijados por la medida del TPS, tendrán 60 días para buscar otras alternativas de regularización, ya que el permiso de trabajo y la protección de deportación, terminarán en ese lapso.