Un gran jurado del condado de Suffolk ha acusado a Wilmer Castillo García, de 22 años, por cargos relacionados con la venta de drogas y por poner en riesgo la seguridad de menores, tras una investigación que se inició luego de que 12 estudiantes de la escuela secundaria William Floyd fueran hospitalizados por consumir gomitas con THC.
De acuerdo con la fiscalía, el caso comenzó en marzo de este año, cuando los estudiantes fueron llevados a Peconic Bay Hospital después de enfermarse al ingerir comestibles que contenían tetrahidrocannabinol (THC), el compuesto psicoactivo del cannabis. La investigación llevó a los agentes hasta una cuenta de Instagram vinculada al acusado.
Posteriormente, el 5 y 12 de mayo de 2025, Castillo Garcia presuntamente vendió cocaína y marihuana a un oficial encubierto.
Hoy, el hombre fue procesado por dos cargos de venta criminal de una sustancia controlada en tercer grado y dos cargos de posesión criminal de una sustancia controlada en tercer grado, todos ellos delitos graves clase B; un cargo de posesión criminal de una sustancia controlada en séptimo grado y un cargo de poner en peligro el bienestar de un menor, ambos delitos menores clase A.
Pese a la gravedad de las acusaciones, el juez Anthony Senft Jr. ordenó su liberación bajo palabra debido a que, bajo la ley vigente del estado de Nueva York, los cargos presentados no permiten la solicitud ni la imposición de fianza.
El acusado deberá regresar a la corte el 2 de septiembre. Si es hallado culpable del cargo más grave, enfrenta hasta nueve años de prisión.
Nota del editor: Un cargo criminal es una acusación. Se presume que un acusado es inocente hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal de justicia.
