Cuando Samuel Arévalo Sangurima, un estudiante de séptimo grado de la Escuela Intermedia de Southampton, se unió al equipo de fútbol americano junior de la escuela secundaria este otoño, nadie se imaginó el impacto que tendría en sus compañeros de equipo y entrenadores.
Su entrenador, Matthew Babb, lo describe como un muchacho alegre, que siempre tiene una sonrisa para los demás y que demuestra ganas de participar activamente en cada práctica, donde su presencia nunca falla.
Su carisma es tan grande que sus compañeros, en colaboración con los jugadores del equipo junior de fútbol americano de Greenport, quisieron hacerle un tributo organizando una jugada estrella en el campo de juego donde Samuel pudiera lucirse y recordar siempre.
“Queríamos hacer algo memorable para Samuel,” dijo Babb. “Aunque siempre nos aseguramos de que participe en cada juego, generalmente solo en defensa, queríamos darle ese verdadero momento especial y hacerle saber que es uno de los nuestros.”
El momento perfecto llegó este 26 de octubre pasado en el último partido de la temporada, donde Southampton se enfrentó a Greenport.
Greenport tenía la posesión del balón, solo faltaban un minuto y medio para terminar el partido, pero, según lo acordado antes de que empezara el juego entre entrenadores, jugadores y oficiales, algo mágico pasó. Greenport “perdió” torpemente la pelota en la siguiente jugada y Southampton la recogió, lo que hizo que los árbitros declararan esa jugada como “muerta,” algo que ocurre cuando se toca a alguien en la ofensiva o hacen que alguien en la ofensiva tenga una salida en falso (infracción de zona neutral) o si pasan la línea O y tienen un camino sin obstáculos hacia el quarterback.
Al ocurrir esto, Samuel logró gozar de su momento dorado cuando realizo un tiro de 50 yardas e inició una carrera hacia la línea de gol, con los jugadores de Greenport “intentando” atajarlo mientras Samuel se abría camino en la cancha para hacer el tan ansiado touchdown.
“Estaba extremadamente feliz después, ”dijo Babb, y agregó que Samuel realmente hizo que esta fuera una temporada realmente memorable para todos. “El equipo lo apoyó completamente durante cada práctica sin cualquier indicación de los entrenadores.”
Esta temporada deportiva fue la primera de Samuel y su experiencia le ha llevado a unirse a otros clubes en su escuela, incluyendo el Club Comunitario, el Club de Carpintería y el Club del Anuario.
