Las compañías de construcción enfrentarán multas más elevadas si son declaradas responsables por la muerte o lesiones graves de un trabajador, según una nueva ley recientemente aprobada por la gobernadora del estado de Nueva York Kathy Hochul.
La nueva ley, llamada Carlos’ Law, o la Ley de Carlos en español, es una medida que nació a raiz de la muerte de Carlos Moncayo, un trabajador de construcción de 22 años que murió aplastado cuando se derrumbó una zanja de tierra no reforzada mientras trabajaba en un proyecto en la ciudad de Nueva York en 2015.
Después de una investigación sobre la muerte de Moncayo, se determinó que Harco Construction — la compañía de construcción que estaba a cargo de la supervisión de ese proyecto— eran los culpables y fueron acusados y condenados con cargos de homicidio involuntario y homicidio negligente. La multa que Harco tuvo que pagar fue de $10,000, el máximo que la ley exigía en casos como los de Moncayo.
Bajo la nueva ley, las multas por condenas relacionadas con muertes y lesiones durante proyectos de construcción será de hasta $500,000.
“Evitar que las empresas violen la ley aumentando las sanciones es efectivo,” dijo la Directora Ejecutiva del Comité de Nueva York para la Seguridad y Salud Ocupacional (NYCOSH) Charlene Obernauer.
“Las empresas deben saber que si toman atajos deliberadamente y ponen en juego la vida de los trabajadores, pagarán el precio.”
Según la ley laboral, los empleadores tienen el deber de cuidar, proporcionar y mantener un ambiente de trabajo seguro para sus empleados.
De acuerdo con las regulaciones de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional de los Estados Unidos, OSHA, en inglés, las empresas deben además seguir ciertos protocolos específicos de seguridad que protegen la vida de los trabajadores.
Sin embargo, Obernauer señaló que muchas empresas hacen el mínimo para mantener esa seguridad, y que una empresa de construcción pertenezca a un sindicato o no, hace una diferencia significativa en el número de accidentes y muertes de sus trabajadores.
Según datos de NYCOSH, en el año 2021, el 82% de las muertes relacionadas con construcción en el estado de Nueva York que han sido investigadas hasta ahora ocurrieron en lugares de trabajo no sindicalizados, en comparación con un 18% en lugares de trabajo sindicalizados.
“La mayoría de las empresas que están involucradas en este tipo de muertes no están sindicalizadas y se están aprovechando de los trabajadores, explotándolos con fines de lucro,” dijo Obernauer.
Sin embargo, muchas empresas de construcción en nuestra área no están sindicalizadas, y los trabajadores de construcción, en su mayoría latinos, muchas veces desconocen cómo afiliarse a un sindicato o cual es su función específica.
“Educar a la comunidad sobre lo que es un sindicato y las protecciones que ofrece a un trabajador es algo vital,” dijo Noemi Sanchez coordinadora de Rural & Migrant Ministry en Long Island.
Trabajadores de construcción latinos son los más afectados
Obernauer señaló que según datos oficiales, los trabajadores latinos son los que tienen más probabilidad de morir en un accidente de trabajo.
Según un reporte del Centro para la Democracia Popular de 2013, basado en una revisión de accidentes fatales en el trabajo, el 74% de los trabajadores que mueren en accidentes de construcción son latinos.
M.L., quien quiso mantener el anonimato, se cayó de un techo de una casa en construcción en East Hampton el año pasado, y a pesar de que no tuvo lesiones graves, dijo en una entrevista que se cayó ya que no llevaba el arnés de protección necesario para trabajar en techos ya que su empleador no se los había proveído.
“Muchas veces nosotros mismos ni siquiera nos cuidamos porque yo tendría que haber dicho que no me subía y sin embargo lo hice,” dijo M.L. “Corrí con suerte ese día, pero tampoco sabía que era algo obligatorio que nos tenían que dar.”
“Me alegro que ahora las multas vayan a ser más altas porque así estaremos más protegidos los trabajadores,” dijo M.L.
