En una industria donde las ofertas culinarias no son típicamente reconocidas, el Hospital Stony Brook Southampton se destaca después de recibir una distinción notable al convertirse en la segunda institución sanitaria del país en recibir el premio “Snail of Approval”, o Aprobación del Caracol en español, del grupo Slow Food East End.
El reconocimiento, anunciado el martes, honra al Departamento de Servicios Nutricionales del hospital por su compromiso con el abastecimiento de ingredientes locales y la preparación de comidas que desafían los estereotipos de la comida hospitalaria.
“Los ingredientes frescos marcan la diferencia, no solo en el sabor, sino en cómo hacen sentir a las personas,” dijo Derwin K. Pryear, chef ejecutivo del hospital. “Cuando los pacientes disfrutan sus comidas, levanta sus ánimos y apoya su recuperación.”
El movimiento Slow Food, una iniciativa global que promueve “comida buena, limpia y justa para todos,” evalúa a las instituciones según criterios que incluyen prácticas de abastecimiento, impacto ambiental, conexión cultural y participación comunitaria.
Durante los meses de verano y otoño, el hospital obtiene vegetales de un invernadero en el campus de Stony Brook Southampton y se asocia con granjas del East End para obtener productos adicionales. La cocina también incorpora mariscos capturados localmente, productos de Hampton Coffee y pasteles de South Fork Bakery, que emplea a personas neurodiversas.
“Durante mi visita al Hospital Stony Brook Southampton, quedé impresionado por sus menús para pacientes, que se asemejan a los de un restaurante,” dijo Ralph Reinertsen, presidente del comité Snail of Approval de Slow Food East End.
El enfoque parece estar funcionando con los pacientes. Según Shannon Cressy, directora de servicios dietéticos y minoristas, los puntajes de satisfacción de los pacientes de Press Ganey, un servicio de medición de la industria sanitaria, están en su nivel más alto. “Cuando recogemos bandejas vacías, dice mucho sobre cuánto disfrutan los pacientes la comida que servimos,” señaló.
El hospital de 124 camas sirve comidas para pacientes, además de operar una cafetería para el personal, visitantes y estudiantes de Stony Brook Southampton. Muchos menús se inspiran en la dieta mediterránea, enfatizando ingredientes frescos preparados con atención a las necesidades dietéticas individuales.
El programa de nutrición se extiende más allá de las paredes del hospital. A través del Instituto de Bienestar de Southampton, el hospital ofrece clases mensuales de “Comida como Medicina,” tanto virtuales como presenciales, centrándose en usar la nutrición para prevenir y manejar condiciones crónicas.
Para los pacientes que regresan a casa, el hospital ha desarrollado un programa para facilitar la transición. Dietistas registrados y trabajadores sociales proporcionan un suministro de cuatro días de comestibles no perecederos adaptados a las necesidades nutricionales de cada paciente y las recomendaciones del médico, entregados en bolsas reutilizables.
“El personal se enorgullece enormemente de su artesanía culinaria,” dijo Emily Mastaler, directora administrativa del Hospital Stony Brook Southampton. “Su compromiso con la sostenibilidad, la participación comunitaria y el bienestar de aquellos a quienes sirven ejemplifica los valores del movimiento Slow Food.”
El Hospital Stony Brook Southampton es la institución que más gente emplea en el South Fork de Long Island con más de 1,200 trabajadores. El hospital cuenta con un centro de atención de emergencia, además de centros especializados para tratamiento del cáncer, atención cardíaca y curación de heridas entre sus servicios.
