Se está terminando el año más difícil de nuestras vidas. Un año que nos arrebató 5 miembros de nuestra familia y nos dejó sumidos en el dolor extremo. Sin embargo esta experiencia tan triste, que quizás jamás superaremos, también nos ha permitido conocer de cerca la bondad y la solidaridad de nuestra comunidad.
En nombre de la familia Rivera – Ramos, queremos darles las gracias a todas y cada una de las personas que desinteresadamente nos han acompañado en este trance.
A la Hermana Margarita, que nos acogió en un momento de mucha confusión y nos ayudó a abrir los caminos para lograr despedir con dignidad a nuestros seres amados. Al consulado de Guatemala en Riverhead, que nos representó y nos colaboró con todos los trámites necesarios, a la gente de Tuthill Mangano Funeral Home, que corrió con todos los costos funerarios de nuestros seres queridos, a la liga de fútbol de Riverhead que se movilizó, organizó un partido benéfico y llevó el dinero recaudado, en persona hasta La Esmeralda, Guatemala. A los medios de comunicación locales que han dado cobertura a esta noticia y se han unido a la difusión de las campañas de recolección de fondos, permitiendo que más y más gente se solidarizara con nosotros.
A nuestros amigos y familiares en Guatemala, que han sentido esta pérdida como propia, y han acompañado a nuestra familia moral y económicamente. A la iglesia católica Unidos en La Fe, que hizo el novenario por el eterno descanso de nuestra familia y por supuesto a toda la gente de Riverhead y sus alrededores, que se unieron en oración y respaldo, desde el mismo instante en que se conoció la tragedia.
A cada uno de los que ha dejado una flor o ha encendido una vela en memoria de nuestros familiares. A los que han expresado una palabra, han dado un abrazo, han recordado una anécdota con alguno de nuestros seres queridos o han derramado una lágrima. A todos, todos ellos, un millón de gracias!!!
Es cierto que este ha sido un momento muy difícil para nosotros, pero estamos de pie por ustedes, por su bondad y cariño. Ustedes nos han fortalecido y nos han enseñado que a pesar del dolor, podemos confiar en el descanso eterno de nuestros seres queridos y en un reencuentro al lado de nuestro padre Dios.
Gracias, gracias, gracias!!!
Que Dios los bendiga siempre!!!
Familia Rivera – Ramos