La superintendente del Distrito Escolar de Riverhead, Aurelia Henríquez, renunció a su cargo.
La junta de educación aceptó su renuncia esta tarde en una reunión especial, convocada para aprobar un presupuesto de contingencia para el año escolar 2020-2021.
La dimisión de Henríquez, después de tres años de estar al frente del Distrito Escolar Central, se produce luego de que los votantes del distrito, rechazaran tanto un plan de expansión de capital, como el presupuesto operativo, por primera vez en 14 años. La renuncia también se da, al final de un año escolar que sufrió una interrupción sin precedentes, como consecuencia de la pandemia global.
La junta votó 7-0 para aceptar la renuncia, la cual será efectiva a partir del 30 de junio.
El presidente de la junta directiva escolar, Greg Meyer, leyó una declaración conjunta del consejo y la superintendente, en la que dijo que la funcionaria citó “ciertas diferencias irreconciliables” y los mejores intereses de su familia, como los motivos de su renuncia.
Luego, la junta votó 4-3 para nombrar a la Superintendente Asistente, Christine Tona, como superintendente interina.
Henríquez no pudo ser contactada de inmediato para hacer comentarios sobre su renuncia.
La inminente partida de la superintendente se había rumorado ampliamente en la comunidad escolar y en las redes sociales durante las últimas dos semanas.
Henríquez llegó a Riverhead proveniente de Brentwood, el distrito escolar más grande del condado de Suffolk, donde trabajó como superintendente asistente, por espacio de 10 años.
Henríquez ha sido la primera latina nombrada en el cargo de superintendente en la historia de las escuelas de Riverhead, un distrito conformado en su mayoría por estudiantes latinos. Según datos del Departamento de Educación del estado de Nueva York, un 50% de la población escolar de Riverhead es latina, un 37% corresponde a población blanca y un 10% es afroamericana.
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