Familiares de las cinco personas que fallecieron en un voraz incendio en Riverhead hace poco menos de un mes recibieron en Guatemala la semana pasada a representantes de la Liga de Riverhead que viajaron personalmente al país centroamericano para entregar el dinero recaudado durante el torneo de fútbol benéfico que reunió a más de mil personas recientemente.
Zonia Dinora Rivera Mendoza y sus hijos, Carlos Cifredo Peñate Rivera y Andrea Isamar Gonzalez Rivera, y sus sobrinos, Douglas Edgardo Rivera Aguirre y Carlos Alberto Ramos Aguirre, murieron trágicamente la noche del 16 de noviembre después de que la casa multifamiliar donde vivían se viera envuelta en llamas. Otras cinco personas, residentes de otros apartamentos, lograron escapar ilesos. Desde entonces, decenas de esfuerzos a nivel local se han llevado a cabo para ayudar a los familiares de las víctimas con los costos funerarios y otros gastos.
El presidente de la Liga de Riverhead Edgardo Villafranco voló la semana pasada a Esmeralda, Jerez Jutiapa, en Guatemala, de donde eran originarios las víctimas y donde residen los familiares y allegados de los fallecidos, quienes actualmente están conmocionados y aún en shock después de la triste partida de cinco integrantes de su familia, para hacerles entrega de los fondos recaudados mediante su organización. Uno de los fallecidos, Carlos Cifredo Peñate participaba con regularidad en la Liga de Riverhead.
“Valió mucho la pena venir en persona, conocer a la familia, que es muy grande, y contarles lo mucho que la comunidad en Riverhead los apoya,” dijo Villafranco. “Quería venir en persona para darle el pésame a la familia y entregarles el dinero y las condolencias de todos en Long Island, donde querían mucho a la familia Rivera.”
Villafranco dijo también que se había quedado gratamente sorprendido por lo bien que “todo el mundo” en Jutiapa habla de la familia. Según diversos testimonios de allegados, además de ayudar a sus familiares, la familia Rivera ayudaba en diferentes causas. Villafranco dijo que por ejemplo, Carlos Peñate y sus primos mandaban dinero cada mes para ayudar a las personas mas necesitadas del pueblo, contribuyendo al bienestar general de su natal Jutiapa.
“Se nota que tenían un corazón muy grande, porque todo el mundo me habló muy bien de ellos, de su generosidad, de lo buenas persona que eran. Si alguien necesitaba algo, ellos no se olvidaron nunca de donde venían,” dijo Villafranco.
Recorrer las calles del pueblo de la familia Rivera fue muy emotivo, dijo Villafranco. Visitó la casa en obras que Zonia Rivera estaba construyendo para su retiro y, fue hasta la cancha de fútbol donde Carlos Peñate y sus primos jugaban cuando vivían en Guatemala. También conoció a la Sra. Santos Mendoza—abuela materna de Andrea Isamar y madre de Zonia, quien se encuentra profundamente afectada— y rindió homenaje a la familia frente a un altar especial que hay frente a su casa.
“El altar es lindísimo y lo llena a uno de emoción cuando lo ve,” dijo Villafranco.
La Liga de Riverhead logró recaudar $17,000 en total, entre las inscripciones al torneo de fútbol y donaciones de miembros de la comunidad, dijo su presidente Villafranco. Se repartieron $7,000 a cada una de las dos abuelas de Andrea Isamar —unos 53,500 quetzales guatemaltecos— y el resto, unos $3,000, se le entregarán a la Hermana Margarita Smyth del Apostolado Hispano del North Fork, quien sumará ese dinero a lo que se ha recaudado por otros medios para repartirlo por partes iguales a cada familia mediante un abogado, explicó Villafranco.
Villafranco también le entregó a la familia el trofeo del equipo ganador del torneo y las medallas que los jugadores donaron como tributo.