Hoy les voy a hablar de Roma. Para mí la ciudad más bonita del mundo.
A pesar de su grandeza, Roma es una ciudad relativamente pequeña, manejable, donde uno se puede perder y vivir una estancia inolvidable. Es una ciudad llena de historia, cultura, encanto, rincones, colores, contrastes y miles de reclamos que la hacen única. He vivido temporadas en la ciudad Eterna, y la he visitado en múltiples ocasiones, y siempre que vuelvo tengo la oportunidad de visitar lo conocido y de conocer nuevos lugares y tener nuevas experiencias.
Cuando llegué a España en 1983, el primer viaje que hice dentro de Europa fue a Roma. La leyenda dice que Rómulo fundó Roma en el 753 AC, después de que se disputara con su hermano Remo la ubicación de la fundación de la ciudad. Los hermanos hijos del dios Marte y Rea Silva, fueron abandonados por enemigos en las orillas del Río Tiber para que murieran, pero la Loba Luperca los encontró y cuidó de ellos. Desde entonces la grandeza de Roma creció hasta llegar a ser uno de los imperios más grandes de la historia. Roma en sus comienzos era un estado ciudad. El primer rey de Roma fue Rómulo y después de él vinieron 6 reyes más. Dado que el pequeño estado empezó a crecer, la monarquía se quedó obsoleta, así que después de tensiones y luchas internas, se deshicieron de los reyes, convirtiéndose en una República con un sistema de gobierno de 2 cónsules colegiados, hasta que en el año 27 AC, y dado el crecimiento geográfico de las fronteras por las conquistas militares, Roma se convirtió en un Imperio, siendo César Augusto su primer emperador. El imperio pasó de no sólo ocupar la península itálica, sino que se extendió por Europa, norte de África y Oriente Medio. Llegó un momento en que por la extensión del imperio, fue imposible de gobernar, así que en el Siglo III DC, el emperador Diocleciano dividió el imperio en dos partes autónomas. El Imperio de Occidente con Capital en Roma y el Imperio de Oriente con capital en Constantinopla (hoy Estambul). La grandeza territorial y del ejército, además de la burocracia y la corrupción, hicieron que en el año 476 cayera el imperio romano de Occidente, acontecimiento que sirve a los historiadores para marcar el inicio de la Edad Media, mientras que el Imperio romano de Oriente no cayó hasta mil años después, en 1453, fecha que dio lugar el inicio de la edad Moderna.
A finales de 1983 llegué a vivir a Parioli, un hermoso barrio romano que está entre la Villa Borghese y la Villa Ada. En una parada del mercado de Porta Portese, me compré tres cintas de música de Jimmy Fontana, de Nicola di Bari y de Nani Morandi y un reproductor de casete que fueron mis acompañantes y profesores de italiano, junto con la televisión, en mi primera estancia en Roma. Con ellos recorrí todos los monumentos y ruinas que pude, así como la mayoría de calles, pasajes, plazas, atajos y rincones de la ciudad. Como era invierno, Roma no estaba tan llena de turistas y entonces no era como ahora en que la ciudad está totalmente colapsada por el tráfico y los turistas todo el año, especialmente en verano.
Roma es una ciudad que lo atrapa a uno, no solo por su belleza arquitectónica, no solo por los rincones, por las calles sin acera del centro, sino también por los bares, los restaurantes, por las pizzerías que están por toda la ciudad. La comida italiana es reconocida mundialmente como una de las más deliciosas y que gustan a la mayoría de personas. Es fácil encontrar un restaurante italiano en cualquier parte del mundo. A veces paseando por Roma, buscaba estar cerca de Campo di Fiori, una de las plazas más famosas de Roma, que en su día fue, como su nombre indica, una plaza con césped y flores. En el siglo XVI esta plaza fue utilizada para hacer las ejecuciones de los herejes acusados por la Santísima Inquisición. Posteriormente y hasta la actualidad es un mercado popular que en el centro de la plaza tiene sus paradas y en sus alrededores hay ventas de comida, de panini, de pizza al taglio y pequeños restaurantes pintorescos. Cerca de allí está la Piazza Navona, una de los mejores ejemplos del barroco romano y que es considerada una de las plazas más bonitas del mundo con las fuentes de Bernini y su forma ovalada que la hace tan característica. Es un sitio ideal para disfrutar de un tartufo o de un verdadero y delicioso gelato italiano. Hay todos los sabores que uno se pueda imaginar. Roma es una ciudad para caminar. Los paseos por el foro, por las pequeñas calles del centro, por el Trastevere, por las 7 colinas de la ciudad, por la ciudad del Vaticano, por las plazas que están en medio de los monumentos y las ruinas de la ciudad, lo trasladan a uno a otra época, a otros momentos. Después de un día de largas caminatas, qué mejor que pasear por las alamedas que hay al lado del río al atardecer, cuando la ciudad, al caer el sol, se pinta de magia y todo se impregna de colores rosados y dorados.
La pasta es la comida más popular en Italia. Los italianos comen los anti-pasti, que son absolutamente una delicia y que es lo que se come antes de comer la pasta, entendiendo que siempre se come pasta. Después de la pasta pueden comer cualquier cosa, pero la pasta no la perdonan. Como buen colombiano que soy, recuerdo que al principio comer pasta cada día se me hacía pesado y echaba de menos comer arroz, cosa que era complicada. La pasta y su manera de comerla es única. Cada lugar de Italia tiene su tipo de pasta típico y su salsa. En Roma por ser una ciudad turística, se puede encontrar cualquier tipo de pasta y de salsa. Hay tantos tipos de salsas que uno puede estar semanas cada día probándolas y no te da tiempo de conocerlas todas. Salsas como la boloñesa, el pesto, la fruti di mare, cacio e pepe, napolitana, arrabiata, ai funghi, amatriciana, alle vongole, boscaiola, Alfredo, Alla Sorrentina, puttanesca, se encuentran en cualquier restaurante romano.
Hace muy poco mis sobrinos me hicieron un regalo muy especial en mi cumpleaños a través de un video, en el cual cada uno de ellos explicaba la receta que yo les recordaba. Mi sorpresa fue que varios de ellos dijeron que me recordaban por haberles preparado espagueti carbonara. Es una pasta que personalmente me encanta, y que hoy, para agradecer de alguna forma el regalo de mis sobrinos, quiero enseñar a hacer como homenaje a ellos. Fue Marcela, la señora que me enseñó hace 37 años la receta que preparo de la Carbonara . Todavía guardo el papelito donde apunté sus indicaciones.
Aquí va, espero les guste.
INGREDIENTES 4 personas:
- 1 libra (400 gr) de espaguetis
- 3/4 taza (150 gr) de bacon o tocineta humada con pimienta
- 4 yemas de huevo
- 1 taza (200 gr) de queso parmesano o pecorino rallado
- 1 cucharada sopera de mantequilla.
- Sal y pimienta
PREPARACIÓN:
Poner a hervir abundante agua con sal. Cuando empiece a hervir cocer los espaguetis por el tiempo que indique la caja. Al final de la cocción guardar un vaso de agua de cocción.
Cortar el bacon ahumado en trocitos. Al mismo tiempo que se pone a calentar el agua, poner el bacon en una sartén grande con un poco de aceite y dejar que se dore a fuego medio, revolviendo de vez en cuando hasta que esté doradito.
En un recipiente grande, mezclar las yemas con el queso parmesano, aliñar con sal y pimienta. Añadir la cucharada sopera de mantequilla.
Cuando esté cocida la pasta, recién escurrida y caliente (guardar un vaso del agua de cocción de la pasta), fuera del fuego, echar la pasta en la sartén donde tendremos el bacon doradito, y mezclar por 10-15 segundos para que se impregne la pasta de la grasa que ha soltado el bacon. Añadir a la pasta la mezcla de yemas y queso parmesano con la mantequilla y mezclar muy bien, hasta que todo se impregne y haga como una crema. Si no está muy cremoso, añadir un poco o lo que sea necesaio, del agua de cocción de la pasta que hemos reservado y mezclar muy bien. Debe de quedar muy cremoso.
Servir inmediatamente, y espolvorear con más queso parmesano y un poco de pimienta recién molida por encima.
Nota del Chef: Esta receta es parte de una serie semanal. Mi deseo es que nos permitamos hacer un viaje por el mundo que he conocido y que descubramos recetas de comidas deliciosas y fáciles y que las adoptemos para hacerlas en casa con los nuestros para poder viajar y conocer al menos una parte de esos lugares de los que les voy a hablar.
Foto portada: https://lapiccola.es