Ante la escasez de fórmula para bebés debido a los retiros del mercado por problemas de seguridad de algunas marcas y las interrupciones en la cadena de suministro, la fiscal general de estado de Nueva York, Letitia James, advirtió hoy a los minoristas que el aumento de precios es ilegal. La procuradora dijo que su oficina tiene conocimiento de que en este momento se está vendiendo formula en en línea a precios que superan con creces su valor minorista. La funcionaria instó a los neoyorquinos a estar alerta ante posibles aumentos desproporcionados en los precios y pidió que cualquier aumento drástico que los consumidores identifiquen, sea denunciado de inmediato. Además, alentó a los padres de familia que están experimentando dificultades para encontrar fórmula, a que acudan a sus pediatras de cabecera antes de intentar diluir la fórmula o crear una propia, ya que ambas pueden ser potencialmente peligrosas para un niño. La procuradora también hizo un llamado a las familias que tengan provisiones adicionales sin abrir y sin vencer, para que consideren donarlas a su despensa de alimentos más cercana.
“La escasez nacional de fórmula para bebés es aterradora para los padres preocupados por cómo alimentar a sus hijos”, dijo la Fiscal General James. “Lo último que cualquier familia necesita es que le aumenten el precio a la nutrición crítica para sus pequeños, por lo que estoy avisando a los especuladores que buscan aprovechar esta crisis. Si los neoyorquinos ven aumentos exorbitantes en el precio de la fórmula para bebés, los animo a informarlo a mi oficina de inmediato. Cualquiera que busque sacar ventaja de esta crisis está sobre aviso”.
La ley de Nueva York prohíbe que los comerciantes se aprovechen injustamente de los consumidores vendiendo bienes o servicios que son vitales para su salud, seguridad o bienestar a un precio excesivamente alto, dijo la procuradora a través de un comunicado de prensa. Debido a la escasez en todo el país, la fiscal aconseja a los consumidores que compren solo la fórmula que necesiten y que no se abastezcan innecesariamente, ya que las compras de pánico pueden intensificar la situación y podrían alentar a los vendedores a participar en aumentos ilegales de precios.
Al denunciar aumentos de precios a la procuraduría, los consumidores deben:
- Informar los precios aumentados de forma específica, las fechas, los lugares en los que vieron los precios aumentados y los tipos de fórmula que se venden a sobre costo.
- Proporcionar copias de sus recibos de venta y fotos de los precios anunciados, si están disponibles.
- Las quejas pueden formularse llamando al 800-771-7755.