Por muchas bonitas razones, Madrid es una de esas ciudades del mundo en las que me siento en casa. La visité por primera vez en 1984 y desde entonces no he dejado de ir asiduamente, no solo por trabajo, o porque mi familia política es madrileña, si no por la atracción que me produce su alegría y su espíritu abierto. Durante estos años he vivido de cerca la gran transformación que ha hecho esta bonita ciudad a todos los niveles, convirtiéndose en una de las capitales europeas más interesantes para visitar, vivir o trabajar.
Madrid se encuentra geográficamente en el centro de España, lo que hace, como dice la canción de Sabina, que en ella “se crucen todos los caminos”. Cada fin de semana durante todo el año, muchos españoles de todos los rincones del país van a pasar el fin de semana a la capital, juntándose con los turistas extranjeros que la visitan y con los lugareños. La ciudad siempre está llena de visitantes. Durante la semana la ciudad suele estar atiborrada de trabajadores, empresarios, visitantes ilustres y personas de todos los ámbitos comerciales que van por motivos laborales, artísticos o profesionales a Madrid, haciendo de ella una ciudad dinámica y en constante crecimiento.
Para los visitantes esta ciudad tiene diferentes ofertas, no solo culturales con sus museos y lugares emblemáticos, sus teatros y los musicales. Gastronómicamente hablando Madrid es un paraíso. Hay restaurantes de todos los niveles, para todos los gustos, de todos los sitios de España y del extranjero. Uno puede tapear deliciosamente en cualquiera de los restaurantes andaluces, asturianos, vascos, gallegos, castellanos, baleares, catalanes que hay por la ciudad.
La amplia oferta de negocios de la ciudad es proporcional a su oferta de ocio y turismo. La ciudad se ha transformado para proporcionar a sus ciudadanos y a sus visitantes un lugar moderno con atractivos turísticos de primer nivel, como sus museos y sus edificios insignes.
COCIDITO MADRILEÑO: La receta de Marta y Pepe
Ingredientes para 4 personas:
- 4 tazas (1 Litro) de caldo de pollo
- ½ pollo
- 1/2 libra (200 gr) de costilla de res con hueso
- 1/2 libra (200 gr) de costilla de cerdo
- 1 hueso de jamón
- 1 trozo de jamón ibérico
- 1 pastilla de caldo
- 2 zanahorias
- 2 papas
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla
- 1/4 libra (100 gr) de garbanzos cocidos
- Sal y aceite de oliva virgen
- Pasta para el caldo
PREPARACIÓN:
En una olla a presión poner todos los ingredientes en frío, excepto la pasta y los garbanzos. Aliñar con sal. Cubrir con el caldo de pollo frío. Tapar la olla a presión y poner a cocer. Cuando pite, dejar cocer por 10 minutos y dejar enfriar dentro de la olla.
Colar el caldo. Poner la carne, la verdura y los garbanzos en una bandeja. Aliñar con un buen aceite de oliva virgen y sal.
Poner el caldo en una olla, corregir de sal, cocer la pasta de caldo por 1 minuto.
Servir caliente.
Acompañar con un buen pan y un buen vino.
Nota del Chef: Esta receta es parte de una serie semanal. Mi deseo es que nos permitamos hacer un viaje por el mundo que he conocido y que descubramos recetas de comidas deliciosas y fáciles y que las adoptemos para hacerlas en casa con los nuestros para poder viajar y conocer al menos una parte de esos lugares de los que les voy a hablar.
Foto cortesía de revistaplacet.es